Cómo cuidar el pelo a partir de los cincuenta
Nuestro pelo es delicado y siempre requiere cuidados. Pero esto se acentúa a partir de los cincuenta años. Especialmente, las mujeres con la menopausia se ven afectadas, pero todos hemos visto como nuestro cabello se ha ido empobreciendo y haciéndose más susceptible de caer. Sin embargo, hay cosas que podemos poner en práctica para evitarlo. Vamos a explicártelas.
Apórtale los mejores nutrientes
Un pelo bien nutrido durará más tiempo sano. Por tanto, es indispensable que le aportes los productos necesarios para ello. Esto guarda relación, por una parte, con llevar una vida sana. Si te alimentas de forma saludable y haces ejercicio físico, no solo tu cuerpo te lo agradecerá, también tu cabello estará más sano. El deporte mejora el riego sanguíneo y activa los folículos capilares.
Pero, por otra, tener un pelo bien nutrido exige que le apliques lo que necesita. Es decir, los productos adecuados para cuidarlo. Utiliza un champú sin alcohol y, lávalo con agua tibia masajeándolo suavemente. Asimismo, si quieres usar acondicionadores o mascarillas, que sean de buena calidad.
Vigila las canas
El cabello se encanece por la edad, pero también por falta de melamina, que es la encargada de darle color. Por tanto, puede ser una muestra de que envejeces, pero también un aviso de que padeces otros problemas. Por ejemplo, puede advertirte de que tienes carencias alimenticias o no estás cuidando bien tu pelo.
Ponte en manos de profesionales
También es muy importante que acudas a peluquerías profesionales. Allí saben cuidar tu pelo. Utilizarán productos neutros como tintes libres de amoniacos y parabenos e instrumentos que no dañarán tu cabello. Asimismo, en caso de detectar algún problema capilar, sabrán qué tratamiento te conviene.
Por ejemplo, pueden aplicarte colágeno o queratina, que son beneficiosos para el cabello. Pero, también podrán ofrecerte terapias con aceite de oliva o almendra, que son excelentes reparadores del pelo dañado.
No maltrates tu cabello
Hay instrumentos que causan daños al pelo. Es el caso de los secadores, que lo someten a excesivo calor y de las planchas, que pueden incluso quemarlo. Pero también hay otras cosas que debes hacer para que tenga buena salud. Por ejemplo, no lo expongas al sol demasiado tiempo.
También es importante que sepas elegir los cepillos y peines que vas a usar. Los primeros deben ser de cerdas naturales y los segundos de púas anchas. Asimismo, cepíllalo con suavidad y comenzando por las puntas. Así sufre menos.
Por otra parte, a la hora de secarlo, también tienes que hacerlo suavemente. De lo contrario, se abrirán las puntas. Por último, no te hagas peinados tirantes con frecuencia ni duermas con el pelo atado. En estos casos, también puede romperse.
En conclusión, te hemos explicado cómo cuidar el pelo a partir de los cincuenta años. Pero también puedes hacer otras cosas. Por ejemplo, masajearlo con suavidad o usar cepillos especiales para hacerlo y también tener mucho cuidado con piscinas y playas. En estas, usa un gorro de licra para bañarte.
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